Descubrir el papel de las praderas de algas marinas en la mitigación del cambio climático
El cambio medioambiental global está provocando el calentamiento del océano, así como la mayor acidificación. «El Mediterráneo es un punto crítico del cambio climático, con un aumento significativo de las temperaturas», señala Jean-Pierre Gattuso, cosupervisor del proyecto SHIFT2SOLVE, de la Universidad Sorbona en Francia. Este aumento de las temperaturas está desplazando y matando poblaciones de peces, estresando los arrecifes de coral y favoreciendo las proliferaciones algales nocivas. Mientras tanto, el aumento de los niveles de acidez supone una amenaza para especies como los erizos de mar, los caracoles marinos y las ostras, cuyas conchas se disuelven a un ritmo más rápido. Es probable que estos daños afecten no sólo a la biodiversidad marina, sino también a la vida de las comunidades costeras y más allá.
Algas marinas para medir el impacto del clima oceánico
El equipo del proyecto SHIFT2SOLVE pretendía avanzar en los métodos innovadores de identificación y medición de estas amenazas, como paso clave para desarrollar estrategias eficaces de mitigación. El proyecto contó con el apoyo de las Acciones Marie Skłodowska-Curie (MSCA). Para alcanzar sus objetivos, el equipo del proyecto se centró en una especie de pradera de algas marinas endémica del Mediterráneo: la «Posidonia oceanica». Uno de los principales objetivos era evaluar el impacto del calentamiento y la acidificación de los océanos en esta importante planta marina, con el fin de valorar su estado de salud y analizar qué medidas deben tomarse. «La "Posidonia" desempeña un papel clave en el Mediterráneo», explica Núria Teixidó, la cosupervisora del proyecto de la Universidad Sorbona y de la Estación Zoológica Anton Dohrn en Italia. «Proporciona hábitats a los peces y protege el litoral regulando las corrientes y las olas. También almacena carbono en sus larguísimos sistemas radiculares».
Drones aéreos y modelización de IA
Bajo la dirección de Gattuso y Teixidó, el beneficiario de una beca de las MSCA Jordi Boda utilizó técnicas de análisis de vanguardia para evaluar la salud de estas poblaciones de algas marinas, con el fin de desarrollar modelos predictivos para estimar los impactos del cambio climático a más largo plazo. Se utilizaron drones aéreos para caracterizar praderas de «Posidonia» y se aplicaron herramientas de aprendizaje profundo e IA para entrenar las fotos de los drones en el reconocimiento de hábitats de vegetación submarina. «El uso de drones aéreos fue una forma poderosa de estudiar las zonas costeras, ya que permitía estudiar áreas más extensas», afirma Teixidó. Parte de este trabajo de campo se llevó a cabo en las aguas que rodean la isla de Ischia, en la bahía de Nápoles. Los respiraderos de CO2 de origen volcánico son una ventana única a las posibles condiciones futuras de acidificación. También se realizaron trabajos de laboratorio en el Institut de la Mer de Villefranche, afiliado a la Universidad Sorbona.
Medidas eficaces de conservación y restauración
Un hallazgo clave fue que la «Posidonia» parecía tolerar niveles crecientes de acidificación oceánica, con un rendimiento mejor de lo que se pensaba en un principio. No obstante, el equipo observó daños en las hojas, lo que evidencia niveles elevados de estrés. «Es algo que pretendemos estudiar de cara al futuro», añade Teixidó. Otra área de investigación futura en la que basarse es el análisis aéreo de drones. Estas técnicas tienen un potencial enorme para proporcionar un conocimiento profundo de las comunidades de las praderas de algas marinas y los ecosistemas costeros. Conocer la extensión de las poblaciones de «Posidonia» y la cantidad de carbono que almacenan podría ayudar a impulsar medidas medioambientales. Conocer mejor estas comunidades vegetales marinas es esencial para poner en marcha medidas eficaces de conservación y restauración. «En el caso de la "Posidonia", la capacidad de almacenar CO2 es espectacular», afirma Gattuso. «El carbono puede almacenarse en sedimentos de hasta seis metros de espesor: se trata de CO2 que se retira de la atmósfera y puede eliminarse durante siglos o milenios».
Palabras clave
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