Seguimiento y gestión con un enfoque climático inteligente de los suelos forestales europeos
Los suelos forestales rebosan vida y biodiversidad. Sus procesos y la gran diversidad de su biota (organismos vivos) impulsan el ciclo de los nutrientes, los flujos de carbono y gases de efecto invernadero (GEI) y otros servicios ecosistémicos relacionados con el suelo. En la actualidad, los suelos forestales no se tienen suficientemente en cuenta en los modelos computacionales, los escenarios climáticos, la toma de decisiones forestales y la política climática. El equipo del proyecto HoliSoils(se abrirá en una nueva ventana), financiado con fondos europeos, colmó importantes lagunas sobre los efectos de la gestión forestal y las alteraciones naturales en el funcionamiento y la resiliencia del suelo. Los resultados respaldarán una modelización, una toma de decisiones y unas políticas más eficaces para mitigar el cambio climático y mantener el buen funcionamiento de los servicios ecosistémicos.
Marco armonizado de vigilancia del suelo para los inventarios paneuropeos
«Desarrollamos protocolos armonizados para los análisis microbianos y probamos su eficacia en distintos tipos de bosques de Europa», explica la coordinadora del proyecto, Raisa Mäkipää, del Instituto de Recursos Naturales de Finlandia(se abrirá en una nueva ventana). En amplios experimentos de campo, el equipo analizó la composición de la comunidad microbiana y la biomasa microbiana del suelo, la actividad enzimática y la respiración (tasa a la que el suelo libera CO2 a la atmósfera) en distintos tipos de bosques europeos y prácticas de gestión forestal. Entre los resultados clave, se mostró que tanto las bacterias como los hongos tenían composiciones comunitarias específicas para cada lugar. Sin embargo, según Mäkipää, «la biomasa microbiana del suelo parece ser una variable explicativa de la respiración del suelo más importante que la comunidad microbiana».
Identificación y validación de prácticas eficaces de gestión del suelo forestal
En Europa, los suelos forestales se ven muy afectados por las prácticas de gestión y los aprovechamientos, lo que significa que es necesario tomar decisiones con un enfoque climático inteligente sobre el uso de los bosques para mantener la salud del suelo. Los organismos del suelo también son sensibles a la sequía y a las perturbaciones, cuanto más grande es el organismo, más sensible es. Los bosques boreales son el bioma más extenso del mundo, caracterizado por densos bosques de coníferas que se encuentran en regiones de latitudes altas con inviernos fríos. El equipo de HoliSoils descubrió que en los bosques boreales la fertilización nitrogenada aumenta la biomasa fúngica, así como la estabilización del carbono y la respiración del suelo. La silvicultura de cobertura continua en turberas puede mejorar la hidrología que controla los procesos microbianos aeróbicos/anaeróbicos del suelo. El aclareo de rodales puede aumentar la actividad biológica del suelo si favorece el crecimiento de la vegetación bajo el dosel forestal y aumenta la producción de «hojarasca», la principal fuente de materia orgánica de los suelos forestales. En HoliSoils también se descubrió que, en los bosques mediterráneos, el riesgo de incendios puede reducirse mediante la quema de roza (cortar y quemar árboles), esta práctica disminuye el carbono total almacenado en el suelo, pero crea «fracciones de carbono orgánico del suelo» más estables (reservas de carbono distintas) que almacenan carbono durante más tiempo.
Gestión forestal sostenible desde el punto de vista climático y organismos del suelo
El equipo de HoliSoils estudió la salud del suelo en los lugares de prueba situados en diferentes partes de Europa, desde turberas boreales hasta bosques mediterráneos. Aunque los suelos forestales europeos gozan en general de buena salud, los mayores problemas se observaron en los suelos degradados de las turberas, los suelos forestales acidificados de Europa central y los suelos afectados por los incendios forestales del sur de Europa. «Según nuestras pruebas de gestión forestal inteligente desde el punto de vista climático, estos problemas pueden abordarse con prácticas que incluyan rodales mixtos en lugar de monocultivos, aclareos moderados que puedan reducir los riesgos de sequía y silvicultura de cobertura continua en turberas», concluye Mäkipää. Esta riqueza de información(se abrirá en una nueva ventana) contribuyó a la base de datos GlobalFungi(se abrirá en una nueva ventana) que muestra la variación de la diversidad fúngica a escala mundial. «También creamos mapas de propiedades del suelo(se abrirá en una nueva ventana) que pueden utilizarse para la toma de decisiones e integrarse en modelos de vulnerabilidad y escenarios de cambio climático a escala continental», señala Mäkipää. Los protocolos para los análisis microbianos del suelo pueden ser utilizados por los Estados miembros de la Unión Europea (UE) a la hora de abordar la propuesta de Ley de vigilancia del suelo de la UE. Además, las metodologías desarrolladas y probadas para la evaluación del carbono del suelo y los GEI sirven a los expertos de los informes sobre GEI del sector del uso de la tierra, cambio de uso de la tierra y silvicultura en la UE. En HoliSoils se ha contribuido considerablemente a un futuro saludable para los suelos forestales europeos.