Sistemas de origen biológico industrial más circulares y sostenibles certificables
Los sistemas industriales de origen biológico utilizan recursos biológicos renovables para producir productos y materiales biológicos. Existe una plétora de sistemas y etiquetas de certificación de la sostenibilidad (ECS) para permitir la trazabilidad y transparencia de los impactos de la sostenibilidad a lo largo de las cadenas de valor y el comercio, dentro de la Unión Europea (UE) y a escala mundial. Dada la rápida proliferación de estos sistemas, es crucial disponer de métodos para evaluar su rendimiento. El proyecto SUSTCERT4BIOBASED(se abrirá en una nueva ventana), financiado con fondos europeos, desarrolló una metodología para evaluar la eficacia, solidez y exhaustividad de las ECS de sostenibilidad actuales para los sistemas industriales de origen biológico. Asimismo, forma parte de la BMT que están desarrollando conjuntamente tres proyectos de Horizonte Europa: SUSTCERT4BIOBASED, STAR4BBS y HARMONITOR.
Cumplir los requisitos de sostenibilidad y circularidad
La BMT evalúa los requisitos en tres niveles: sistema (gobernanza, transparencia y solidez operativa), contenido (sostenibilidad y circularidad) y resultado (repercusiones de la aplicación). El equipo de SUSTCERT4BIOBASED dirigió el desarrollo del nivel de contenido de la BMT. «SUSTCERT4BIOBASED se centró por igual en los tres pilares de la sostenibilidad —medioambiental, social y económico— e incluyó aspectos de circularidad como la eficiencia de los recursos y la reciclabilidad como cuarta categoría. El nivel de contenido de la BMT proporciona una evaluación de cada ECS basada en la fracción de requisitos aplicables (en función del ámbito de aplicación de las ECS) cubiertos en esas cuatro categorías», explica Iris Vural Gursel, coordinadora del proyecto de la Universidad de Wageningen(se abrirá en una nueva ventana). La BMT se probó en nueve sistemas y etiquetas internacionales y de la UE seleccionados. En vez de comparar las ECS, el proyecto los evaluó individualmente para identificar las oportunidades de cada propietario de ECS de mejorar el rendimiento de sus sistemas, animándoles a hacerlo.
Ideas y recomendaciones basadas en los resultados de la evaluación
Las evaluaciones mostraron que, en general, las ECS abordaban los requisitos en las categorías social y medioambiental, mientras que las categorías económica y de circularidad recibían menos atención. Entre las mejoras propuestas para la categoría social se incluyen requisitos explícitos sobre prácticas contractuales justas, prestaciones de la seguridad social y baja por maternidad. La inclusión de requisitos más explícitos sobre notificación de emisiones de gases de efecto invernadero, control de la calidad del aire, eficiencia en el uso de la energía y uso de energías renovables serían adiciones positivas a la categoría medioambiental. Unos requisitos más específicos sobre planes empresariales, mantenimiento de registros de prácticas fraudulentas y gestión del riesgo económico podrían mejorar la cobertura de las ECS en la categoría económica. Se recomiendan requisitos de circularidad más allá de la gestión de residuos, como la reutilización o el reciclaje de los flujos residuales y la eficiencia de los recursos. Además, las ECS para productos de origen biológico podrían incluir requisitos sobre el diseño para la reciclabilidad y estrategias para la ampliación de la vida útil del producto.
Análisis de costes y beneficios con «contabilidad de costes reales»
La adopción de las ECS es voluntaria, por lo que los análisis de costes y beneficios son fundamentales. Los costes internos de la certificación incluyen los costes de cumplimiento, como la formación y los honorarios de auditoría, mientras que los beneficios internos incluyen primas de precios y una mejor posición en el mercado. «El equipo de SUSTCERT4BIOBASED utilizó la “contabilidad de costes reales” para incorporar también las externalidades, es decir, los costes y beneficios medioambientales y sociales que no se reflejan en los precios de las transacciones y que generalmente no se incluyen en los análisis de costes y beneficios», explica Vural Gursel. Un análisis de costes y beneficios de la adopción de ECS en las cadenas de valor de la caña de azúcar, el algodón y la madera de origen biológico mostró que los beneficios internos generalmente superaban a los costes internos. El análisis de las externalidades se vio obstaculizado por la falta de datos, tanto por la reticencia de las organizaciones a compartirlos como por la falta de mediciones voluntarias. «Es necesario seguir investigando, para lo que habrá que estandarizar los requisitos de información sobre las principales externalidades medioambientales y sociales en todos los regímenes de certificación de las cadenas de valor de origen biológico», subraya Vural Gursel.
Aunar esfuerzos en torno a las ECS
Los resultados se utilizaron para ofrecer recomendaciones a los cuatro grupos destinatarios clave: responsables políticos, propietarios de ECS, agentes industriales y agentes regionales de la bioeconomía. Si todo el mundo se pone de acuerdo sobre el estado actual y la futura evolución de los sistemas de certificación, el camino de Europa hacia una transición ecológica hacia una bioeconomía circular y sostenible se acorta.