El aspecto positivo de los profesionales de la enfermería de mayor edad
En muchos países europeos hay una escasez de profesionales de la enfermería que probablemente irá en aumento. Las condiciones laborales actuales no fomentan un envejecimiento saludable en el trabajo y la mayor parte de las enfermeras dejan la profesión antes de la edad normal de jubilación. Como resultado, la profesión de la enfermería se enfrenta a una escasez de profesionales. A pesar de esto, diversos datos del proyecto NEXT revelan que en situaciones en las cuales hay una cantidad limitada de alternativas laborales, los profesionales de la enfermería están obligados a permanecer en su profesión. En consecuencia, esto ha causado el envejecimiento de la profesión de la enfermería. Hay un prejuicio por parte de los empleadores y de la sociedad en general en contra de los trabajadores de mayor edad por lo que se refiere a sus habilidades para desempeñar bien sus funciones. Esto también es aplicable a la enfermería en relación con los prejuicios relativos a la capacidad física, a una reducción de la flexibilidad y a las bajas por enfermedad. Debido a que la enfermería es una profesión con demandas físicas, emocionales y psicológicas enormes, la cuestión por resolver es si la profesión de la enfermería es posible o no a una edad mayor. En un esfuerzo por responder a esta cuestión, se llevó a cabo una evaluación en diez países que cubrió a profesionales de la enfermería de cincuenta años o más que trabajan en hospitales. La proporción de enfermeros mayores que trabajan en hospitales variaba ampliamente, siendo la mayor en Finlandia y Noruega y la menor en Bélgica y Portugal. Algunos de los muchos hallazgos interesantes fueron que los profesionales de la enfermería mayores y más jóvenes trabajaban la misma cantidad de horas y que no había diferencia en cuanto al ausentismo laboral debido a enfermedades o a obligaciones familiares. En cuanto a las diferencias, se encontró que los profesionales de la enfermería de mayor edad tienden a afirmar que sus condiciones laborales son mejores y suelen englobar a un colectivo positivo de individuos sanos y de alto rendimiento. Por lo tanto, una integración de éxito de enfermeros mayores en la fuerza laboral es posible y sería beneficiosa. Esto indica que los centros de atención sanitaria deberían reconocer que los profesionales de la enfermería de mayor edad pueden ser a menudo un recurso que ofrece más experiencia, más dedicación y una salud psicológica mejor. Confiemos en que los centros de atención sanitaria evitarán la discriminación por edad y promoverán un apoyo mutuo entre profesionales de la enfermería.
