La reforma del capital social
A pesar de que las instituciones de la esfera social y económica han experimentado un progreso esperanzador hacia la economía de mercado, a nivel de la ciudadanía la transición ha sido lenta. El cambio ha afectado profundamente a los ciudadanos y al modo en que acceden y gestionan sus redes de capital social. El inconveniente en este caso es que el concepto de capital social supone una serie de claros preceptos democráticos más propios de Occidente que no encajan en el entorno de los países del Este. Son buenas muestras de ello las discrepancias entre los expertos respecto al capital social disponible de la ciudadanía y el bajo nivel de confianza en las autoridades. Asimismo, son incapaces de llegar a un acuerdo respecto a la fortaleza de las redes interpersonales. Las investigaciones llevadas a cabo en el marco del proyecto IDARI apuntaron a dos grandes obstáculos para las iniciativas de índole colectiva. El primero es la patente ausencia de nexos de unión entre el capital social y la ciudadanía. El segundo consiste en la falta de comprensión de los beneficios que reportaría este tipo de actividad colectiva. Según el estudio, la acción coordinada de los representantes políticos podría solucionar la situación mediante la difusión de información fidedigna entre la población, por una parte, y la puesta en contacto de las distintas partes interesadas, por la otra. El hecho de recurrir a las autoridades para que actúen como intermediarias es contrario al modo en que se suele entender el capital social, concepto éste según el cual normalmente se suele prescindir de tales mediadores. En este sentido, se pone de relevancia la necesidad de adaptar el modelo occidental de capital social para poderlo implantar en el entorno de los países de Europa del Este. Otro obstáculo que se debe abordar es el hecho de que el concepto de capital social se basa en la concurrencia automática de intereses en un entorno en que ya existe el capital social. De nuevo, el hecho de recurrir a las autoridades como intermediarias puede entrar en conflicto con los distintos intereses existentes. El estudio realizado en el marco del proyecto ha motivado una serie de tesis acerca de la implantación del capital social en las que se destacan los distintos conceptos, problemas y soluciones posibles.