La política de innovación en Kazajstán y Armenia
Los socios del proyecto establecieron cuatro objetivos operativos: formación, recogida de datos, control de calidad y difusión de información. El consorcio, dotado de fondos europeos, formó a institutos de los dos países dedicados a la investigación de las políticas de innovación en el uso de las herramientas y los métodos de evaluación comparativa de la innovación empleados en TrendChart. Además, se orientó a dichos institutos sobre la recogida de datos en relación a la capacidad de innovación y las políticas pertinentes de estas dos naciones. También se les enseñó a informar y realizar una evaluación comparativa de las capacidades y políticas en materia de innovación de los dos países. Los hallazgos se difundieron a través del sitio web de RIPKA y de congresos. Los socios del consorcio también participaron en talleres sobre política de innovación titulados «Reestructuración de las instituciones públicas de investigación y desarrollo» y «Seguimiento de las políticas». Los hallazgos pusieron de manifiesto que las medidas correspondientes a la política de innovación propuestas por el gobierno armenio debían complementarse con metas cuantitativas concretas y aplicarse con el mayor rigor. Armenia cuenta con una población cualificada, pero adolece de niveles bajos de inversión pública y privada en investigación y desarrollo. Los resultados relativos a Kazajstán mostraron que también contaba con una población cualificada pero que existía una financiación insuficiente y una estructura industrial no apta. Gracias a la introducción de TrendChart, las autoridades políticas y los institutos de investigación kazajos y armenios pudieron beneficiarse de las mejores prácticas a nivel mundial para la gestión de la política de innovación. Además se logró una aproximación entre las políticas de innovación de estos países y las de la Comisión Europea y los Estados miembros.