Uso compartido de las instalaciones de investigación de actínidos
Los actínidos son un grupo de elementos radioactivos, normalmente de vida media larga, entre los que se incluye el uranio y el plutonio. El estudio del comportamiento de los actínidos en el ciclo al completo del combustible nuclear, desde las labores de extracción minera hasta el desecho de residuos, precisa de herramientas e instalaciones específicas que no abundan en Europa. El proyecto financiado con fondos europeos «ACTINET integrated infrastructure initiative» (ACTINET-I3) reforzó la infraestructura de las instalaciones europeas dedicadas a abordar el reto de los actínidos con las herramientas teóricas y experimentales necesarias y, al mismo tiempo, amplió el acceso a las mismas. La financiación otorgada dio lugar a cincuenta y nueve proyectos conjuntos de investigación realizados por más de setenta investigadores jóvenes en las cinco instalaciones participantes. En ellos se trató sobre materiales basados en actínidos, la química de los actínidos en relación a la separación y los actínidos en el entorno geológico. Mediante cuatro actividades de investigación en cooperación en las que participaron los miembros del consorcio se buscó mejorar el equipo de las instalaciones disponibles y obtener datos de interés común. Los experimentos se completaron con el desarrollo de una infraestructura virtual de apoyo a las labores de modelización y teóricas. Además de los aspectos científicos y las mejoras de las infraestructuras de investigación, el proyecto buscó reforzar la capacidad europea en este ámbito formando a la nueva generación de científicos. Parte de las labores educativas y de formación son tres escuelas de verano y dos reuniones plenarias que se complementan con la concesión de becas de viaje a estudiantes. Los investigadores jóvenes contarán por tanto con una situación más favorable para crear las futuras estrategias de gestión de los actínidos sobre un conocimiento científico sólido. ACTINET-I3 contribuyó enormemente al progreso de la investigación en torno a los actínidos gracias al aprovechamiento más racional de las instalaciones especializadas, que de otro modo sólo estarían al alcance de unos pocos. Investigadores de institutos académicos y universidades de Europa compartieron conocimientos en la red y ampliaron su propia pericia. Las interacciones realizadas han mejorado la situación de las ciencias europeas en torno a los actínidos y contribuido a que en el continente se genere energía nuclear sostenible y respetuosa con el medio ambiente.
