Un «mar de cambios» en la gestión marina de la UE
Los mares Báltico, Negro y Mediterráneo y el Océano Atlántico se deben administrar tomando en consideración la tierra, el aire, el agua y todos los seres vivos, lo cual incluye a la población, sus actividades y sus instituciones. Para reforzar el fundamento científico de este «enfoque ecosistémico» en las políticas marinas, la Unión Europea ha concedido financiación al proyecto «Knowledge-based sustainable management for Europe's seas» (Knowseas). El primer paso de cara a implantar este enfoque ecosistémico pasa por averiguar cómo entiende la gente su función en el entorno marino. Con este fin, se realizó una encuesta a raíz de la cual ya se ha publicado un informe político. El equipo del proyecto está examinando también los efectos de fenómenos extremos sobre los mares de Europa así como maneras de reducir la eutrofización (es decir, el crecimiento exagerado de plantas por el suministro excesivo de nutrientes) en el Báltico. Se observó que los cambios en los océanos se deben en muchos casos a variaciones climáticas y de la temperatura del agua, lo cual podría escapar al control de las políticas marinas. Otro aspecto de interés son los efectos de la pesca, el transporte, la producción de energía para la acuicultura, la calidad del agua y las actividades recreativas en los mares. Esta información servirá a la comunidad científica para sopesar los costes medioambientales de la degradación con los beneficios económicos generados por los bienes y servicios proporcionados por estos ecosistemas. Asimismo, el equipo del proyecto ha definido posibles conflictos y alianzas entre estructuras de gestión de los mares con el fin de facilitar la futura aplicación de las políticas. Además, ha desarrollado una herramienta con la que se pretende ayudar a las partes interesadas a comunicarse con eficacia con los responsables políticos. Estos logros han servido para consolidar los esfuerzos de la Unión Europea por desarrollar una estrategia de gestión holística que tenga en cuenta tanto a los humanos como los ecosistemas en los que se sustentan.