Tecnologías de reducción de ruidos para crear vehículos más silenciosos
La calidad de la vida en las ciudades está enormemente influenciada por la contaminación acústica y del aire, de la que los automóviles son responsables en gran medida. Si bien los convenios alcanzados recientemente por fabricantes de vehículos han abordado la eficiencia de los combustibles, las partículas contaminantes del aire y la limitación del peso, la reducción de ruidos sigue constituyendo una causa de preocupación. La Unión Europea asignó recientemente fondos para el desarrollo del proyecto «Integrated solutions for noise and vibration control in vehicles» (CO2NTROL), también conocido como Green City Car, cuyo objetivo se centraba en la incorporación de soluciones de reducción de contaminación acústica probadas en laboratorios a miniautomóviles urbanos, en un intento por reducir las emisiones de ruido provocadas por estos vehículos. Por un lado, los métodos activos de reducción de ruidos incluían un controlador de ruidos en motores, un resonador Helmholtz y un control activo de ruido en la zona de cabina. Por otro, los métodos pasivos incluían un nuevo diseño de neumáticos e incorporaban al automóvil novedosos materiales de reducción de sonido. Se fabricaron diversas opciones para cada una de estas iniciativas, cuyo funcionamiento fue probado bien en instalaciones de ensayo industrial, bien directamente en automóviles urbanos. De esta forma, se logró una reducción de ruidos de hasta 7 dBA (decibelios de acuerdo con el sistema A) y una mejora sustancial de la calidad del sonido. Las medidas puestas en práctica para la reducción de sonidos en el proyecto Green City Car han demostrado su eficacia en la reducción de la generación de ruido, lo que permite incrementar la eficiencia sin comprometer la calidad del sonido. En consecuencia, las conclusiones del proyecto pusieron de relieve el gran potencial que presentan estas soluciones de cara a su utilización tanto en la industria del automóvil como en otras aplicaciones.