Diseños de astronaves para aeroplanos
Con el fin de mejorar la seguridad y la eficiencia del transporte aéreo, se está estudiando la posibilidad de usar nuevos composites como los polímeros reforzados con fibras de carbono para sustituir los laminados tradicionales. Las estructuras reticulares utilizadas para los cohetes espaciales protegen la resistencia y la seguridad y, por consiguiente, son una opción atractiva para los composites. Varias empresas importantes del sector aeroespacial trabajaron juntas con el fin de desarrollar este tipo de estructuras en retícula para fabricarlas en serie. La Unión Europea financiaba estas actividades como parte del proyecto «Advanced lattice structures for composite airframes» (ALASCA). Las posibilidades de las nuevas estructuras de fuselaje se demostraron en dos conceptos de diseño de barril de fuselaje de tipo retícula. Uno se puede construir con tendido o bobinado automático de cinta y el otro tiene una piel para soportar carga y una cubierta multifuncional de la estructura primaria. Los científicos han obtenido tres patentes sobre las configuraciones y los materiales desarrollados en el marco del proyecto. La reducción de un 10 % de masa del fuselaje primario que permite la tecnología daría lugar a una reducción del 1 % del consumo global de combustible. Teniendo en cuenta el gran volumen de viajes aéreos y las distancias largas que ahora se cubren de forma habitual, esto significa una reducción apreciable de las emisiones por parte del sector aeroespacial. La tecnología de ALASCA puede reducir de forma importante los costes y el peso de las piezas de aeronave fabricadas, sin afectar a la seguridad ni la eficiencia. Un proyecto de continuación, para el cual se ha logrado financiación, abordará los estudios adicionales necesarios para aumentar el nivel de madurez de la tecnología de estas estructuras.