Calderas con calificación energética A
En su compromiso por reducir su impacto medioambiental, la Unión Europea obliga a etiquetar muchos electrodomésticos con información energética, entre ellos las calderas electrodomésticas. En el momento en el que el etiquetado energético de diseño ecológico sea de obligado cumplimiento para las calderas electrodomésticas sólo se comercializarán las que se enmarquen en las categorías A y B. En la actualidad no existen calderas de este tipo que cumplan los requisitos vigentes. El proyecto ECOWATERHEATER permitió dotar de fondos europeos a un equipo de científicos para que diseñara una caldera con la mejor relación entre coste y duración y que ejerciese el menor impacto medioambiental posible en comparación con el resto de calderas de Europa. Para ello se centraron en dos áreas clave: una mejora del aislamiento que evite pérdidas de calor y un control de temperatura inteligente. Además, para compensar el aumento en los costes de producción, los investigadores estudiaron un proceso nuevo de fabricación sin soldaduras para los tanques interiores. El método emplea menos material y evita aplicar el proceso de soldadura tradicional, que resulta caro y consume considerable energía. El material aislante basado en aerogel es singular y su aplicación mejora el aislamiento en las conexiones. Este sistema de control sencillo facilita la adopción de un sistema de tarificación doble para calentar agua durante las horas valle mediante un sistema inteligente de control de la temperatura. La mejora del aislamiento y el sistema de control de temperatura reducen la perdida de calor en el sistema prototipo en más de un 40 % y un 7-12 %, respectivamente. El sistema de tanque sin soldaduras abarata la producción al emplear menos material y evitar las soldaduras y además reduce el riesgo de corrosión, aumentando por tanto su duración y reduciendo los costes de ciclo de vida. ECOWATERHEATER podría contribuir considerablemente a la sostenibilidad de la producción de agua caliente gracias a la reducción tanto de materiales necesarios como de las pérdidas de calor, factores ambos que contribuyen a aumentar el atractivo económico del sistema para fabricantes y consumidores. Además, el diseño situará a las empresas participantes en el proyecto en una posición ventajosa debido a que no existe una tecnología comparable que cumpla con las estrictas normativas vigentes.
