Mejorar la prognosis para el tratamiento de la esquizofrenia
Un tercio de los pacientes esquizofrénicos son resistentes al tratamiento (ERT), la mitad de los cuales no responden a ninguna medicación. Es una cifra preocupante. El resto de los pacientes responde únicamente a la clozapina, el primer fármaco para el tratamiento con antipsicóticos atípicos. Cuanto antes se administre el fármaco, mejores serán los resultados. El equipo del proyecto CRESTAR (Pharmacogenomic biomarkers as clinical decision-making tools for clozapine treatment of schizophrenia) ha empleado técnicas genéticas, y epigenéticas y datos epidemiológicos de pacientes para los que se había descrito su respuesta al tratamiento y una reacción adversa a la medicación. Este enfoque podría ayudar a identificar a los pacientes refractarios a los antipsicóticos y a los que desarrollarán efectos secundarios potencialmente fatales de la clozapina, lo cual es particularmente preocupante en niños y adolescentes. También se registraron los pacientes con más probabilidades de no responder a ninguno de los antipsicóticos. Los investigadores emplearon muestras de más de once mil pacientes con ERT y de casi veinticinco mil casos control para llevar a cabo análisis de asociación del genoma completo. Esto permitió identificar diez nuevos loci genéticos relacionados con ERT y la falta de respuesta al tratamiento con clozapina. Un análisis exhaustivo empleando una cohorte poblacional constituida por 544 pacientes ayudó a acelerar el descubrimiento de factores genéticos y biomarcadores para predecir los efectos del consumo de clozapina en pacientes con esquizofrenia, especialmente con respecto a la agranulocitosis, caracterizada por la disminución de neutrófilos en sangre. Los investigadores también han definido fenotipos y genotipos de ERT en poblaciones con esquizofrenia y, actualmente, están trabajando para determinar asociaciones genéticas y las causas de ERT. En este sentido, se descubrió que la diabetes de tipo 2, prevalente en pacientes tratados con clozapina, está modulada por el aumento del peso y los pacientes con una mayor puntuación de riesgo poligénico para la esquizofrenia eran más propensos a ser tratados con clozapina y a presentar una respuesta nula al tratamiento. La gran cantidad de datos generados a lo largo del proyecto ha sentado las bases y continuarán aportando valor en aras de desarrollar pruebas predictivas para el tratamiento con clozapina y la seguridad del mismo. Se prevé que estas pruebas se desarrollen empleando los datos del proyecto e información adicional recopilada a lo largo de los próximos años. Los resultados de las actividades de CRESTAR reducirán la necesidad de hospitalización, los costos de los ensayos y la carga económica para los sistemas de salud, al tiempo que aumentarán la seguridad y el porcentaje de eficacia de las pruebas clínicas. La difusión a través de la página web del proyecto, talleres y publicaciones también ayudará a reducir el estigma social asociado con la esquizofrenia.
Palabras clave
Esquizofrenia, biomarcadores, antipsicótico, CRESTAR, clozapina