La relación entre la arqueología y el colonialismo
Durante mucho tiempo la arqueología y el colonialismo han estado estrechamente ligados. Desde la segunda mitad del siglo XIX, este fenómeno afecta especialmente a Oriente Próximo. Durante más de dos siglos, las colecciones occidentales se han enriquecido con piezas de gran antigüedad obtenidas en esta región del mundo mientras que, de forma simultánea, los mismos países de origen se veían desprovistos de la posibilidad de trabajar en la recuperación de su patrimonio e historia. Gracias a la financiación de la Unión Europea, el proyecto «Moving archaeological knowledge away from neo-colonialism» (MAKAN) analizó esta cuestión en Egipto y Sudán. La naturaleza de este pronunciado contraste resulta compleja. Todo parte de la percepción que históricamente se tiene de los trabajadores locales, esto es, como trabajadores no cualificados que necesitan un control constante del que se han de encargar supervisores foráneos. Tras esto subyace una falta de interés local por su pasado, al que se ignora en gran medida. Además, la financiación que reciben los proyectos occidentales centrados en Oriente Medio excede con mucho las cantidades que los países de la región pueden dedicar a sus propios proyectos, lo que conduce a una suerte de neocolonialismo que impera en el ámbito de la arqueología. Por último, los informes relativos a los estudios y a los datos referentes a estos emplazamientos rara vez se publican en el idioma del país que acoge las excavaciones. Pese a todos los estudios realizados sobre interacciones de carácter intercultural en las excavaciones de Oriente Medio y su impacto en las vidas y puntos de vista de los habitantes locales, en las publicaciones de mayor prestigio apenas se tratan los temas relacionados con las políticas en torno a la arqueología. Esto resulta especialmente cierto en lo que a la egiptología se refiere. Asimismo, las piezas obtenidas en los territorios de la región pueden acabar lejos de su lugar de origen, en países occidentales, e incluso los museos locales pueden resultar inaccesibles para los habitantes de estas naciones. MAKAN analizó la fase en que se conformó la arqueología egipcia. El proyecto disfrutó de acceso directo a varios archivos, lo que contribuyó al desarrollo de una historia de la disciplina a partir de una perspectiva autocrítica. Esto derivó en un mayor grado de comprensión sobre la dinámica alrededor de la generación de conocimientos. En último término, el objetivo consistía en crear fórmulas eficaces para incrementar la concienciación respecto a la importancia de que las comunidades locales renueven el vínculo con su pasado. El trabajo también incluía hacer que los museos, tanto locales como de otros países, fueran percibidos como espacios para la expresión y el intercambio comunitarios. Una parte fundamental del proyecto MAKAN consistió en participar en una exposición que tuvo lugar en la ECEB («Oficina Cultural y Educativa Egipcia») de Londres en la que se exhibieron doscientas piezas procedentes del Museo Petrie. Los egipcios que residen y trabajan en la ciudad londinense colaboraron de forma directa en el evento celebrado como complemento al taller organizado en diciembre de 2012 en Egipto. Mediante dichos eventos se han recabado más puntos de vista sobre la forma en que diversos grupos locales tanto de Egipto como de Sudán se acercan a su pasado. Esto abre la senda para ulteriores debates, reflexiones y para la elaboración de nuevas directrices destinadas a regir los futuros trabajos de arqueología en el Valle del Nilo.
Palabras clave
Arqueología, colonialismo, Oriente Próximo, egiptología, arqueológico, conocimiento arqueológico, neocolonialismo, museos