Microorganismos del suelo contra la delincuencia
El proyecto MISAFE (The development and validation of microbial soil community analyses for forensics purposes) refleja el compromiso de la Unión Europea de trabajar por un continente seguro. Su objetivo fue diseñar herramientas a fin de utilizar rutinariamente muestras de suelo en las investigaciones forenses. El consorcio, financiado por la Unión Europea, reunió a pequeñas y medianas empresas, fuerzas policiales e instituciones académicas. El análisis de suelos es una herramienta muy importante en las investigaciones forenses pues permite obtener pistas sobre el origen de una muestra desconocida, o puede servir para comparar muestras halladas en escenas de delitos con muestras tomadas de sospechosos. No obstante, hasta la fecha la aplicación o uso de información del suelo en investigaciones de delitos ha sido limitada, generalmente por ignorar el grado de importancia de dicha información. La diversidad microbiana en el suelo ha sido apenas descrita, por su gran variedad; se estima que existen de diez mil a diez millones de especies de bacterias en un solo gramo. Además, más de un 99 % de las bacterias no pueden cultivarse en el laboratorio ni en medios de cultivo microbianos. No obstante, sí es posible utilizar tecnologías moleculares de gran utilidad para aislar y caracterizar el ADN bacteriano, sorteándose así el problema del cultivo. A pesar de que ciertas especies de bacterias son abundantes en el entorno natural, la mayoría de las especies están formadas por poblaciones muy pequeñas, lo que se conoce como la biosfera rara. Por lo tanto, la estructura de la comunidad bacteriana puede ser una herramienta de gran utilidad para averiguar el origen de una muestra de suelo. El proyecto MISAFE fomentó el uso en criminología de comunidades microbianas del suelo mediante el desarrollo de tecnologías adecuadas para garantizar que la resolución, fiabilidad y robustez de resultados obtenidos sean las adecuadas. Los socios del proyecto desarrollaron herramientas para la toma, almacenamiento y procesamiento de muestras del ADN del suelo ajustándose a las necesidades de la criminología. Los científicos investigaron además el uso de tecnologías de ADN en investigaciones criminológicas de suelos para buscar pruebas, y desarrollaron y aplicaron software de análisis de datos e interfaces de usuario en las herramientas de análisis de ADN recogido en suelos. Además, MISAFE validó y consolidó el uso de la criminología de suelos microbianos conforme a diferentes ordenamientos jurídicos de la Unión Europea. También estableció normativas y procedimientos básicos a fin de crear una base de datos microbiana de suelos para toda la Unión Europea. El fruto más destacado del proyecto ha sido el hecho de demostrar que se puede aplicar este tipo de técnica criminológica de análisis del suelo en beneficio de la justicia. Y su aplicación no se limita a crímenes físicos contra personas; la elaboración de perfiles sobre microorganismos del suelo puede servir también en delitos de tipo medioambiental, o para relacionar propiedades biológicas edáficas con el rendimiento agrícola, o para analizar emplazamientos con fines de estudio metagenómico, entre muchas otras posibilidades.
Palabras clave
MISAFE, comunidades microbianas edáficas, biosfera rara, ADN, ciencia forense, ordenamiento jurídico de la UE, base de datos de los microbios del suelo
