Nuestra alimentación afecta a la comunicación y la regulación interna de nuestro organismo
En bioquímica, los eicosanoides u oxilipinas son moléculas de señalización que se originan debido a la oxidación de ácidos grasos poliinsaturados (AGP). Estos son importantes mediadores celulares y, a menudo, su acción se asemeja a la de las hormonas locales. Aunque se sabe que diferentes compuestos farmacológicos afectan a la síntesis de oxilipinas, se dispone de muy poca información sobre el efecto de ingredientes alimentarios en estas moléculas. Teniendo todo esto en cuenta, los investigadores del proyecto financiado por la Unión Europea FOOD-OXYLIPIN-TOX (Impact of food ingredients and contaminants on endogenous inflammation mediators –Targeted metabolomics of the eicosanoid pathway) se propusieron investigar los efectos de varios ingredientes alimentarios en los niveles endógenos de oxilipinas. Para cuantificar los niveles de oxilipinas en muestras biológicas, estos están desarrollando un nuevo método de cromatografía líquida acoplada con espectrometría de masas (LC-MS). Este método ha demostrado una mejor sensibilidad y resolución y, actualmente, se está empleando para examinar los niveles de alrededor de noventa oxilipinas. Los resultados del proyecto señalan que los niveles de oxilipinas en sangre derivadas de los AGP están correlacionados con los niveles del precursor AGP. Dado que la ingesta de ácidos grasos poliinsaturados omega 3 conduce a efectos antiinflamatorios, se podría asumir que estos efectos están mediados por las oxilipinas derivadas de estos ácidos grasos omega 3. El objetivo de los experimentos en curso es identificar los mediadores más potentes de la acción de los ácidos grasos omega 3. Por otro lado, también se cree que los polifenoles presentes en los alimentos ejercen un efecto antiinflamatorio. Respecto a la formación de oxilipinas, se cuestiona que la modulación de las ciclooxigenasas (el blanco de fármacos como el diclofenaco y la aspirina) sea uno de los modos de acción posibles de los polifenoles. En base a métodos metabolómicos específicos desarrollados durante el proyecto, se pudo demostrar de manera clara que no es probable que los polifenoles afecten realmente a la inflamación aguda mediante la modulación de la actividad de la ciclooxigenasa 2. (Para más información consulte la publicación: Food polyphenols fail to cause a biologically relevant reduction of COX-2 activity. DOI: 10.1371/journal.pone.0139147). En conjunto, los resultados del proyecto ponen de manifiesto que los ingredientes de los alimentos alteran lípidos reguladores. Es más, las herramientas desarrolladas pueden ser ahora aplicadas para estudiar los mecanismos implicados en este proceso.
Palabras clave
Eicosanoides, oxilipinas, ácidos grasos poliinsaturados, enzima, xenobiótico
