European Commission logo
español español
CORDIS - Resultados de investigaciones de la UE
CORDIS

Article Category

Noticias
Contenido archivado el 2023-03-02

Article available in the following languages:

Colocar una caperuza a la gripe

Científicos europeos han arrojado nueva luz sobre el proceso por el que el virus de la gripe se apropia del mecanismo de producción celular de su huésped. Estos descubrimientos podrían conducir al desarrollo de nuevos medicamentos con los que combatir futuras pandemias de grip...

Científicos europeos han arrojado nueva luz sobre el proceso por el que el virus de la gripe se apropia del mecanismo de producción celular de su huésped. Estos descubrimientos podrían conducir al desarrollo de nuevos medicamentos con los que combatir futuras pandemias de gripe. El apoyo de la UE a este trabajo se canalizó a través del proyecto FLUPOL, financiado con 1,97 millones de euros provenientes de los fondos comunitarios. Uno de los grandes temores de los gobiernos y las agencias de salud es la posibilidad de una devastadora pandemia de gripe. Les preocupa que cepas de gripe aviar de gran virulencia, como la H5N1, puedan desarrollar la capacidad de contagiarse entre humanos. Por esta razón se buscan nuevos métodos y tratamientos para prevenir la propagación del virus. En este nuevo estudio, biólogos estructurales dirigidos por Stephen Cusack del Laboratorio Europeo de Biología Molecular (EMBL) han revisado a fondo una de las formas en las que el virus se hace con el control de las funciones de la células infectadas. Los resultados se han publicado en la revista Nature Structural and Molecular Biology. Los investigadores han conseguido una imagen de alta resolución del dominio de una proteína clave cuya función es la de permitir al virus multiplicarse apropiándose del sistema de producción de proteínas de la célula infectada. Una vez que el virus de la gripe infecta una célula, comienza a multiplicarse. La proteína clave en este proceso es la polimerasa viral. Esta proteína con carácter enzimático copia el material genético del virus y contribuye a la creación de más virus. Un componente de la polimerasa denominado PB2 desempeña una función vital al robar una importante «etiqueta» de las moléculas de ARN de la célula huésped. A continuación utiliza esta etiqueta para desviar la producción de proteínas hacia la síntesis de proteínas virales. Los científicos pertenecientes a los equipos de investigación de Stephan Cusack y Darren Hart, en el EMBL de Grenoble, descubrieron el dominio del PB2 responsable de fijar la etiqueta. A partir de ahí produjeron cristales que estudiaron bajo el potente haz de rayos X de la Instalación Europea de Radiación Sincrotrónica (ESRF). «Los virus son extremadamente astutos cuando se trata de apropiarse de los mecanismos normales de la célula anfitriona. El virus de la gripe roba la contraseña del ARN mensajero de la célula huésped, moléculas que contienen las instrucciones para la producción de proteínas, y la usa para acceder a la maquinaria celular de síntesis proteica, que aprovecha en su propio beneficio», explicó el Dr. Cusack. En realidad la contraseña toma la forma de una pieza corta adicional de ARN conocida como «caperuza». Esta caperuza (cap) debe estar presente en el inicio de cualquier ARN mensajero (ARNm) para que comience el mecanismo de síntesis de proteínas de la célula. La polimerasa viral se fija al ARNm de la célula anfitriona a través de su caperuza, la corta y la incorpora al inicio de su propio ARNm. Este proceso se denomina «robo de caperuza» (cap snatching). El mecanismo de producción de proteínas de la célula anfitriona puede entonces reconocer la caperuza del ARNm que pertenece al virus, tras lo cual la célula empieza a producir proteínas virales en lugar de las suyas propias. Los investigadores del EMBL han conseguido una imagen que muestra un dominio de PB2 fijado a una caperuza, mostrando por primera vez los aminoácidos involucrados en el reconocimiento de esa estructura en particular. Los científicos lograron identificar la caperuza entre dos aminoácidos PB2. A pesar de que este mecanismo de reconocimiento no es muy distinto al de otras proteínas que enlazan las caperuzas, sus detalles estructurales sí que lo son. Los compañeros del Centro Nacional de Biotecnología de Madrid demostraron que la alteración del sitio de unión del PB2 a la caperuza consigue parar la reproducción del virus de la gripe. «Estos descubrimientos sugieren que el sitio de unión del PB2 a la caperuza es una diana con muchas posibilidades de éxito para los medicamentos contra la gripe», aseguró Darren Hart. «Nuestros nuevos indicios estructurales nos ayudarán a diseñar imitaciones de la caperuza que inhiban la replicación vírica y, por consiguiente, ralenticen la propagación del virus y la gravedad de la infección.»

Artículos conexos