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Un final glorioso para el vehículo Johannes Kepler de reabastecimiento de la Estación Espacial Internacional

Si por alguna extraña razón alguien hubiera estado ayer en la zona deshabitada del sur del Océano Pacífico alrededor de las 23.00 CEST, podría haber contemplado la reentrada de material espacial en la atmósfera terrestre. El material no pertenecía a un asteroide apocalíptico...

Si por alguna extraña razón alguien hubiera estado ayer en la zona deshabitada del sur del Océano Pacífico alrededor de las 23.00 CEST, podría haber contemplado la reentrada de material espacial en la atmósfera terrestre. El material no pertenecía a un asteroide apocalíptico, sino que eran los del Vehículo Automatizado de Transferencia Johannes Kepler (ATV-2) de la Agencia Espacial Europea (ESA) que, tras reabastecer con éxito a la Estación Espacial Internacional, regresó a la atmósfera terrestre cargado de residuos para su combustión y destrucción en una maniobra de reentrada controlada. Debido a que algunas piezas de la nave no tripulada no se desintegran en dicho proceso, el equipo de la ESA que diseñó el vehículo de reabastecimiento, así como su predecesor en 2008, el Julio Verne, programaron que la caída de los residuos restantes se produjera en una zona no habitada del Pacífico Sur con el fin de evitar accidentes. Tras cumplir con su misión de abastecimiento y apoyo a la Estación Espacial Internacional, Johannes Kepler se llenó con unos 1 200 kilos de residuos y material sobrante y, de la misma manera que toneladas de basura espacial natural desaparecen a diario al colisionar con la atmósfera terrestre, la aeronave de 10 toneladas se autodestruyó durante su reentrada en la órbita terrestre. Desde su lanzamiento el 16 de febrero de 2011 desde el Centro Espacial de Kourou, en la Guayana Francesa, Johannes Kepler ha sido clave para la Estación Espacial Internacional, al entregar casi 7 toneladas de material: 1 170 kg de carga seca, 100 kg de oxígeno y 851 kg de combustible para reabastecer los tanques de la Estación y 4 535 kg de combustible para sus propios motores, con los que ha ajustado y elevado la órbita de la Estación. La aeronave también participó en las maniobras del 2 de abril de 2011 destinadas a que la Estación Espacial Internacional evitase una colisión con un fragmento de basura espacial. Antes de que esta misión llegara a su fin también contribuyó a impulsar la órbita de la Estación, para lo que realizó tres secuencias de encendido de sus motores, los días 12, 15 y 17 de junio que elevaron la órbita de la Estación Espacial Internacional hasta cerca de los 380 km. Pero como todo tiene su fin, tras cuatro meses de operaciones intensivas la tripulación cerró las escotillas del ATV-2 el domingo 19 de junio por la tarde a las 17.30 CEST y éste se desatracó del complejo orbital el lunes 20 de junio hacia las 17.00 CEST. La ESA informó que Johannes Kepler realizó una maniobra adicional no programada para esquivar un fragmento de basura espacial el lunes a las 20.30 CEST. Mike Steinkopf de la ESA indicó que: «Esta mañana [por el martes] el centro de dinámica de vuelo de la NASA predijo una conjunción con un objeto a una distancia de cincuenta metros. Se programó un impulso (encendido de motores) del ATV a 1,5 m/s que lo situó en una órbita completamente segura.» Por suerte, Johannes Kepler almacena a bordo combustible suficiente en caso de que sea necesario realizar cualquier tipo de maniobra no programada. Johannes Kepler encendió sus motores dos veces para descender de su órbita, en un primer momento a las 19.00 CEST para entrar en la órbita terrestre y de nuevo a las 22.05 CEST para dirigirlo hacia su objetivo en el Pacífico Sur. Los restos de su desintegración cayeron al océano alrededor de las 22.50 CEST. La última contribución del Johannes Kepler a la investigación espacial ha sido la gran cantidad de datos que ha dejado tras de sí en la Grabadora de Desintegración de Reentrada, semejante a una caja negra aeronáutica. Muchos aspectos de las reentradas controladas destructivas siguen sin aclararse y, gracias a la grabación de los últimos momentos del Johannes Kepler, la ESA podrá obtener mediciones de la ubicación, temperatura, presión y altitud de la desintegración del vehículo antes de que dicha caja se separase.Para más información, consulte: Blog del ATV-2 Johannes Kepler: http://blogs.esa.int/atv/ Agencia Espacial Europea (ESA): http://www.esa.int/esaCP/Spain.html

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