Flujo de datos: un sistema móvil de control urinario para la detección precoz de la lesión renal
Cada año, 1,7 millones de pacientes mueren en el mundo por la pérdida rápida de la función renal, conocida como lesión renal aguda (LRA). La enfermedad está asociada a las largas estancias en los hospitales, con el desarrollo de LRA en más de la mitad de los pacientes internados en unidades de cuidados intensivos, donde se quintuplica el aumento en la mortalidad. La detección precoz de la LRA y el tratamiento rápido puede salvar vidas y disminuir el tiempo de estancia en los hospitales. El proyecto Clarity, financiado con fondos europeos, tiene como objetivo lograr esto mediante el desarrollo de un sensor innovador integrado en una sonda de Foley, que supervisa de manera automática y continua el flujo de orina y notifica al personal sanitario cuando surge un problema.
Dinámica de fluidos
«Muchas empresas lo han intentado y no lo han logrado, porque no es fácil medir la orina», explica Jean-Paul Benhamou, coordinador del proyecto Clarity. «El flujo puede ser cualquiera, desde casi nada hasta 300 ml por hora, y la viscosidad cambia según lo que comiste y tu plan de tratamiento». La información sobre la producción de orina suele ser recolectada de manera manual por el personal, que inspecciona la bolsa colectora y registra su medición cada pocas horas. Esto no es solo trabajoso, sino que no es lo suficientemente uniforme ni confiable, a lo que Benhamou añade: «Además, la transmisión de la información “sin contacto” mediante un sistema electrónico puede reducir el riesgo de contaminación».
Información inalámbrica
Clarity RMS, desarrollada por la empresa de tecnología médica israelí RenalSense, está enfocada en las unidades de cuidados críticos, y controla el flujo de orina de manera continua utilizando intercambios de temperatura. Le ofrece al personal sanitario información del paciente en tiempo real y notificaciones sobre las fluctuaciones en una consola junto a la cama y en el sistema de historiales clínicos electrónicos del hospital. «Con la transmisión inalámbrica de información de Clarity Stream desde la sonda de Foley, el personal sanitario puede supervisar a sus pacientes desde cualquier lugar del edificio. Además, los pacientes en sus hogares serán controlados mediante una aplicación móvil», explica Benhamou, vicepresidente comercial y de mercadotecnia internacional de RenalSense. «El objetivo final es la medicina de precisión». Además de prevenir la LRA, Benhamou afirma que el dispositivo es indispensable para controlar el equilibrio hidroelectrolítico, tanto en hospitales como en entornos en los que la función renal debe ser caracterizada, por ejemplo, en las residencias de ancianos. Tras el éxito de la prueba en el Hospital Herzog en Jerusalén, RenalSense pondrá en marcha otra prueba en un hospital en Francia este año.
Encoger para adaptar
Para alcanzar su potencial, señala Benhamou, el dispositivo debe ser aún más miniaturizado, para ajustarse por completo dentro de una sonda de Foley. «El sensor en nuestro producto existente, que mide unos pocos centímetros, se reducirá a unos pocos milímetros». Mediante el apoyo de la Unión Europea, RenalSense pudo llevar a cabo una evaluación de la viabilidad del dispositivo Clarity Stream, ampliar su estrategia de comercialización y planificar sus próximos desarrollos técnicos. «Fue un desarrollo como prueba de concepto de la nueva línea de productos», añade Benhamou. «Luego de nuestro éxito con el dispositivo Clarity de primera generación, estamos seguros de que podemos avanzar con la segunda generación. Los modelos de diseño están preparados, y estamos buscando capital adicional para implementarlos».
Palabras clave
Clarity, RenalSense, riñón, lesión, orina, flujo, cuidado, intensivo, supervisar, inalámbrico, Foley, catéter