Ejercicio mental: una aplicación de entrenamiento cognitivo para ayudar a las personas a perder peso La enseñanza del control cognitivo ofrece una vía esperanzadora para el tratamiento de problemas conductuales como los hábitos alimentarios poco saludables. El proyecto CCT busca establecer la base de unas intervenciones sanitarias eficaces. Salud © Nils Versemann, Shutterstock Más de la mitad de la población adulta de la Unión Europea sufre sobrepeso, lo cual genera unos costes anuales de la atención sanitaria que ascienden a más de 120 000 millones de euros. La enseñanza del control cognitivo (CCT, por sus siglas en inglés) representa un planteamiento prometedor para hacer frente a la obesidad. El proyecto financiado con fondos europeos CCT tiene por objeto investigar los beneficios de este método a través de pruebas de laboratorio y de un ensayo a gran escala. «El objetivo global es comprender de qué manera la enseñanza del control cognitivo puede ayudar a las personas a regular su comportamiento en relación con la alimentación», explica el coordinador del proyecto, Chris Chambers. Aplicación para teléfonos inteligentes La base del proyecto es Restrain, una aplicación para teléfonos inteligentes creada por Chambers y su equipo en colaboración con el Instituto de Investigación sobre Innovación de los Datos de la Universidad de Cardiff (el Reino Unido). Los participantes son asignados a un ensayo de 90 días, durante los cuales llevan a cabo tareas de enseñanza cognitiva y se pesan cada semana. La principal ventaja de este enfoque es que se pueden probar a la vez varios métodos: la aplicación Restrain cuenta con quince planes diferentes a los cuales se asignan los participantes de manera aleatoria. Aunque no hay ningún control con placebo, algunos participantes reciben una dosis mayor que otros. «Una gran parte de nuestro comportamiento al comer es instintivo y automático», comenta Chambers. «Algunos métodos implican enseñar a las personas a evitar estas respuestas a los alimentos poco saludables, mientras que otros están más orientados a la consecución de objetivos, alentando a las personas a que establezcan de forma consciente sus metas y se comprometan a lograrlas». La decisión de usar una aplicación para teléfonos inteligentes hace que el ensayo resulte más accesible para el público que las intervenciones relacionas con la obesidad que se llevan a cabo en el laboratorio. Miles de personas ya se han descargado la aplicación y el proyecto CCT tiene como objetivo alcanzar un total de 36 000 participantes. «Estamos haciendo todo esto de una vez con una muestra grande, creando una competición entre los distintos métodos para ver cuál funciona mejor», añade Chambers. «Nunca antes se había hecho a esta escala». Estimulación cerebral El segundo pilar del proyecto consistió en ver si la estimulación cerebral podría aumentar la capacidad de las personas para resistirse a los alimentos poco saludables. En el laboratorio, el equipo dirigió la estimulación transcraneal con corriente directa a partes del cerebro que se cree que desempeñan un papel importante en el proceso de toma de decisiones, y además se utilizó resonancia magnética funcional para cartografiar las principales redes neuronales implicadas. «Observamos una firma neuronal específicamente asociada con la inhibición de la respuesta motora», subraya Chambers. Sin embargo, los resultados de dos grandes experimentos no sugieren que la estimulación cerebral pueda ser un complemento útil a la enseñanza del control cognitivo. El trabajo contó con el apoyo del Consejo Europeo de Investigación. «Esta beca de investigación ha sido increíble», comenta Chambers. «Esta es una investigación de alto riesgo y la beca ha demostrado ser muy flexible en cuanto a la necesidad de pensar rápidamente, cambiar de orientación y contratar a gente nueva. Todo esto ha sido de gran ayuda». Esta flexibilidad resultó ser especialmente importante durante la pandemia de coronavirus. «Lo último que quieres es un confinamiento, donde la gente no va a restaurantes de comida rápida, aumentan las tasas de consumo de alcohol y, por lo general, disminuye la actividad física», comenta Chambers. «Toda esta situación hace que resulte complicado realizar un ensayo. Hemos tenido que ser muy cuidadosos con la manera en que llevamos a cabo el ensayo y procesamos los datos». Ahora estamos empezando a recibir esos resultados, aunque está previsto que el proyecto continúe durante otros doce meses. Entonces, el equipo buscará la manera de convertir los hallazgos en políticas sanitarias eficaces. «La obesidad representa un problema mundial grave, hasta el punto de considerarse una epidemia», concluye Chambers. «Tenemos que pensar muy seriamente en maneras nuevas de abordar esta situación». La aplicación Restrain está disponible en la tienda Google Play aquí. Palabras clave CCT, control cognitivo, enseñanza, obesidad, cerebro, alimento, Restrain, teléfono inteligente, aplicación, transcraneal, corriente directa
