Un nuevo remolque eléctrico para redefinir el último tramo del reparto
Cuando hace clic en «confirmar» en su pedido en línea, pone en marcha toda una cadena de acciones: desde la estantería de un almacén hasta un avión, y del remolque de un camión a la puerta de su casa, la cadena logística es un proceso complejo y polifacético con muchos eslabones dinámicos. Pero el último paso, llevar el paquete del camión a la puerta de casa, suele ser el más difícil. La situación se complica especialmente cuando la entrega se realiza en una ciudad, lo que se denomina «el último tramo del reparto». De hecho, el último tramo del reparto es responsable del 30 % de todo el tráfico urbano y del 80 % de los atascos en hora punta. Los camiones de reparto también generan el 25 % de todas las emisiones de carbono relacionadas con el transporte urbano y hasta el 50 % de otros polutantes vinculados con el transporte. «La creciente urbanización de las ciudades, junto con el rápido aumento del comercio electrónico, hace que el modelo tradicional del último tramo del reparto sea caro e ineficiente —comenta Natalia Tomiyama, cofundadora de NÜWIEL, una empresa emergente alemana—. Por lo tanto, existe una necesidad urgente de cambiar a sistemas logísticos más ágiles y sostenibles». Para lograrlo, NÜWIEL desarrolló un remolque eléctrico, el primer remolque de reparto inteligente y totalmente eléctrico. «El remolque eléctrico se puede utilizar con cualquier bicicleta o bicicleta eléctrica y permite mover hasta 300 kg de mercancías pesadas y voluminosas de una forma muy intuitiva, pero del todo automática y segura», explica Tomiyama. Gracias al apoyo proyecto FUTrailer, financiado con fondos europeos, el remolque eléctrico está facilitando la transformación de la logística del último tramo del reparto.
Desarrollo ulterior de la tecnología del remolque eléctrico
Según Tomiyama, la financiación de la Unión Europea posibilitó al equipo de NÜWIEL desarrollar aún más su tecnología de sensores y solicitar la protección de la propiedad intelectual. «Una vez enganchado a una bicicleta, nuestra tecnología permite que el remolque eléctrico ajuste de forma automática su velocidad a la de la bicicleta, lo que significa que los ciclistas pueden transportar hasta un 200 % más de carga útil sin comprometer su comodidad», agrega Tomiyama. El remolque eléctrico también cuenta con un innovador sistema de frenos redundantes y una suspensión diseñada a medida, los cuales ofrecen mayor seguridad. «Estas prestaciones no solo garantizan un viaje seguro y suave, sino que también aumentan la durabilidad y la vida útil del remolque eléctrico», puntualiza Tomiyama.
Ganar una licitación pública con el Grupo postal belga
El proyecto ayudó a NÜWIEL a transformar su cadena de suministro: el 80 % de sus materiales procede ahora de Europa. La empresa también logró obtener financiación de inversores estratégicos y establecer una cultura de trabajo inclusiva, contratando a diferentes profesionales para hacer crecer el equipo. Con todo, el resultado más importante del proyecto ha sido ganar una licitación pública para suministrar remolques eléctricos al Grupo postal belga (bpost). Según bpost, esto ya ha ayudado a reducir sus emisiones de CO2 en un 97 % y la contaminación acústica en un 47 %.
Redefinir el último tramo del reparto
El objetivo de NÜWIEL era redefinir la logística urbana, y lo consiguió. Su remolque eléctrico no solo ayuda a que el comercio electrónico cambie a un sistema de reparto más sostenible, sino que además favorece que la ciclologística alcance todo su potencial de mitigación climática. «Estamos orgullosos de todos los logros conseguidos durante este proyecto, que nos ha permitido expandirnos en Europa», concluye Tomiyama. Hace poco, el remolque eléctrico de NÜWIEL recibió el título de «Mejor remolque para bicicletas de 2022» por parte de IAA Transportation.
Palabras clave
FUTrailer, remolque eléctrico, último tramo del reparto, bicicleta eléctrica, carbono, logística, comercio electrónico, cadena de suministro
