Cómo adaptarse mejor al cambio climático
El calentamiento global plantea riesgos para toda forma de vida en la Tierra. El grado de gravedad depende de las medidas que tomemos. Sin embargo, a veces los esfuerzos de adaptación climática pueden salir mal y, de esa forma, empeorar nuestra vulnerabilidad, reducir nuestro bienestar y poner en peligro el desarrollo sostenible. Para hacer frente a este problema, el equipo del proyecto REGILIENCE, financiado con fondos europeos, ha creado una herramienta de autoevaluación para detectar los riesgos de una adaptación deficiente o insuficiente.
¿Qué provoca la inadaptación?
Según un artículo publicado en el sitio web de REGILIENCE, la inadaptación es el resultado de no haber abordado adecuadamente las situaciones futuras y las incertidumbres, de deficiencias en su aplicación, de motivos geográficos o demográficos y de la priorización de soluciones populares a corto plazo. También se debe a una información limitada y a un uso inadecuado de los datos, a una dirección financiera insostenible y a estar atrapados en sistemas aislados. El equipo de REGILIENCE identifica cinco categorías de factores de riesgo de inadaptación: falta de eficacia; conocimiento y comprensión insuficientes; falta de integración y coordinación; falta de sostenibilidad y dependencia de las rutas; y falta de pertinencia. «Al controlar los riesgos de inadaptación, es menos probable que las medidas de adaptación provoquen un aumento de la vulnerabilidad o perjudiquen los medios de subsistencia, los ecosistemas y la economía —se informa en el artículo—. Es útil examinar los riesgos de inadaptación para detectarlos en una fase temprana de la planificación de una acción de adaptación ya que, una vez identificados, se pueden reducir. Además, comprender los riesgos potenciales puede aumentar la concienciación general sobre la inadaptación».
Orientaciones y recomendaciones
Como se explica en el artículo, la herramienta de autoevaluación está pensada principalmente para personas o instituciones del sector público responsables de planificar o llevar a cabo proyectos o acciones de adaptación regional. Sin embargo, dada la creciente importancia del papel que desempeñan las organizaciones comunitarias y el sector privado en la adaptación, los investigadores de REGILIENCE «animan a los responsables políticos de todos los niveles a utilizar la herramienta para detectar posibles riesgos de inadaptación». La herramienta debe utilizarse durante la fase de planificación de una acción de adaptación climática. Dicha herramienta guía a los usuarios a través de una lista de control de diecisiete preguntas que se centran en los factores de riesgo de una adaptación deficiente o insuficiente. Los usuarios pueden averiguar el grado de inadaptación de una acción concreta seleccionando «sí», «parcialmente» o «no» como respuestas a cada pregunta. El equipo del proyecto recomienda que la lista de verificación sea cumplimentada por más de una persona para poder comparar los resultados. Los socios del proyecto también ofrecen una serie de recomendaciones sobre cómo evitar la inadaptación en la práctica. Para evitar este problema, sugieren que los responsables políticos aborden la complejidad de la inadaptación, anticipen mejor la evolución futura, armonicen las estrategias y el trabajo entre sectores, fomenten la participación de todas las partes interesadas y asignen financiación a las acciones de adaptación adecuadas. En el proyecto REGILIENCE (Resilience Strategies for Regions) también se está organizando una serie de diez sesiones abiertas de formación en línea para informar a los agentes regionales europeos interesados sobre el apoyo y las soluciones técnicas disponibles para la adaptación climática. Las sesiones comenzaron en marzo de 2023 y están programadas hasta 2025; la primera se centró en el panorama de la resiliencia en la UE. Para más información, consulte: Sitio web del proyecto REGILIENCE
Palabras clave
REGILIENCE, clima, adaptación, adaptación climática, inadaptación, herramienta de autoevaluación
