Contenido audiovisual estructurado con ayuda de la nueva norma MPEG-21
Cada vez es mayor el número de usuarios con acceso a Internet por banda ancha, por lo que el mercado del contenido audiovisual, como los ficheros audio, cada vez resulta más atractivo. La tecnología de banda ancha evoluciona y ofrece cada vez un ancho de banda mayor, por lo que se convertirá en un medio para distribuir contenido de un consumo mayor de banda ancha, como las películas. El proyecto MUFFINS, financiado con fondos comunitarios, utiliza la norma MPEG-21 para crear un marco de distribución de ese contenido que incluye todos los pasos: creación, comercialización, distribución y consumo. MPEG-21 es una nueva norma que trata de abordar todas estas cuestiones con ayuda de la unidad básica del "Elemento Digital". Los Elementos Digitales son objetos digitales estructurados, que incluyen la representación, la identificación y los metadatos. Los archivos que representan, por ejemplo, la música en un CD incluyen también información del folleto incluido con el CD, como los avisos de copyright. Estos metadatos están incluidos de modo tal que impiden el uso ilegítimo del contenido. Además de proteger el contenido y distribuir información adicional a vendedores y consumidores, el marco puede ayudar también a recuperar un elemento determinado en una red, usando los metadatos integrados en MPEG-21. Estos datos incluyen otra información, como el tipo de contenido, su duración, el nombre del artista y/o de la canción, y los tipos de uso legítimo. El equipo de este proyecto ha desarrollado con éxito, por tanto, un marco que integra contenido de diferentes tipos y de diferentes vendedores. Este contenido puede distribuirse de forma flexible, incluso por parte de usuarios sin licencia, pero sólo puede ser consumido por usuarios con licencia. El contenido se presenta al usuario de forma transparente e integrada, al margen de que el uso sea local o remoto, o de que sea canalizado o distribuido.