Recuento de virus con un citómetro de flujo
Las bacterias inundan los océanos de la Tierra. Los científicos han llegado a entender que estas criaturas microscópicas son actores críticos en el ciclo de nutrientes importantes como el carbono y el azufre. Conforme va aumentando el impacto del ser humano sobre los océanos y la atmósfera, resulta imperativo que mejoremos nuestros conocimientos sobre estas bacterias. Éste fue el objetivo del proyecto BASICS, de tres años de duración, apoyado por el Quinto Programa Marco. En el transcurso de BASICS, se encomendó al Centro Nacional de la Investigación Científica (CNRS), de Francia, la tarea de investigar la influencia de los virus presentes en el agua marina sobre las bacterias. Como parte de su investigación, el CNRS había medido con precisión el número de virus presentes en una muestra determinada de agua marina. Para ello, utilizaron un citómetro de flujo, un instrumento comúnmente utilizado para contar las células sanguíneas. Durante el proyecto BASICS, científicos del CNRS crearon un protocolo para un citómetro de flujo específico (Becton Dickinson FACSCalibur). El protocolo permitió conseguir un gran número de datos de alta calidad, lo que permitió al CNRS analizar una gran cantidad de muestras. La interpretación de los datos por parte del CNRS y sus socios de BASICS ayudará a proporcionar información sobre la compleja relación entre bacterias y virus. Cabe señalar que el protocolo puede ampliarse a otros modelos y tipos de citómetros de flujo.