Mejora de la salud mental adolescente en Europa
En el marco del proyecto SEYLE, financiado en parte por la Unión Europea, se está realizando un estudio de intervención sobre el comportamiento y el estilo de vida de los adolescentes. En éste se examinan los efectos de tres programas de prevención/intervención conforme al paradigma de ensayo controlado aleatorio (ECA). El proyecto está a cargo de un consorcio en el que participan entidades de 11 países europeos más Israel que han seleccionado a más de 12 000 estudiantes a partir de una muestra de colegios europeos escogidos al azar. Se pretende evaluar los efectos de los programas preventivos y seguidamente recomendar modelos eficaces para promover la salud y un comportamiento positivo entre los adolescentes. Los trabajos están coordinados desde Suecia. Los investigadores de SEYLE han creado una base de datos epidemiológicos que reúne información sobre comportamientos saludables y arriesgados de los estudiantes. Se está midiendo la incidencia de conductas autolesivas, conductas temerarias, la violencia y el abuso del alcohol y sustancias estupefacientes, entre otros factores, y los resultados se relacionarán con parámetros definitorios de un estilo de vida sano y favorable al bienestar. Asimismo, se evaluará la actitud de los alumnos ante comportamientos saludables y arriesgados. En cada país hay en marcha tres intervenciones distintas. Concretamente, la orientación de supervisores para que sepan reconocer a estudiantes con necesidades y dónde conseguir la ayuda necesaria; una orientación general para los adolescentes; y un sistema de detección de adolescentes en riesgo a cargo de profesionales de la salud. Las intervenciones fueron diseñadas por especialistas en psiquiatría infantil, epidemiología, psicología, antropología y suicidología. Hasta la fecha se han obtenido datos basales de 12 395 adolescentes. Además se han recabado datos al cabo de tres y doce meses que se encuentran actualmente sometidos a un proceso de control de calidad. Todos los centros de SEYLE han obtenido las aprobaciones éticas de rigor para llevar a cabo el estudio. Todos los cuestionarios y materiales de intervención empleados en SEYLE se elaboraron inicialmente en inglés, se tradujeron posteriormente a nueve idiomas y se retradujeron desde estos al inglés. Las versiones traducidas se sometieron posteriormente a una evaluación de su adecuación cultural y se ajustaron según convino con el fin de obtener datos comparables entre países. El análisis de los datos hasta la fecha señala que los comportamientos arriesgados entre los jóvenes europeos son más comunes de lo que se había previsto. Se espera que los resultados de SEYLE posibiliten una comprensión más precisa de las conductas dañinas entre los adolescentes —un avance muy necesario— y generen información que ayude a diseñar intervenciones preventivas rentables.