Más cerca de una energía más limpia
Hay varios tipos de reactores de combustible en servicio en todo el mundo, y cada uno de ellos tiene sus ventajas y sus desventajas. El reactor de neutrones rápidos, o simplemente reactor rápido, no es considerado el más rentable, pero promete ser capaz de proporcionar una energía más limpia si se superan algunos de los retos que presenta. Los reactores rápidos proporcionan una energía más sostenible y minimizan los residuos nucleares, evitando al mismo tiempo la producción de gases de efecto invernadero. De mayor interés para la generación de electricidad es el reactor rápido refrigerado por gas (GCFR). Este reactor ofrece estas ventajas y además se considera muy seguro. El proyecto GCFR («Reactor rápido refrigerado por gas»), una iniciativa financiada por la Unión Europea, examinó aspectos de los últimos avances en tecnología nuclear como el económico, la resistencia frente a la proliferación y la sostenibilidad. Se mostró que el GCFR aprovecha mejor el material fisionable (es decir, el material que alimenta la reacción de fisión nuclear en cadena) y también reduce considerablemente los residuos radiactivos y sus efectos tóxicos. Esto permite cumplir los requisitos de sostenibilidad para reactores de cuarta generación (Gen IV), un término que se aplica a los reactores nucleares más avanzados en diseño e investigación. Los objetivos de sostenibilidad de Gen IV incluyen la utilización completa del uranio, así como el reciclaje del uranio, el plutonio y otros elementos. También comprenden la rentabilidad, la no emisión de radiactividad al exterior y la no proliferación (evitando la presencia de materiales separados en el ciclo del combustible). Las iniciativas que han surgido de este proyecto harán avanzar la tecnología del GCFR y ayudarán a llevar a Europa a un nuevo entorno de soluciones energéticas avanzadas.