Mejorar la terapia génica para tratar el colesterol de baja densidad
La enfermedad arterial coronaria (EAC) es la causante de alrededor de la mitad de todas las muertes en Europa. De éstas, un 30 % podría evitarse si se consiguiera disminuir las lipoproteínas de baja densidad (LDL) y la presión arterial de los pacientes. Otra estrategia consistiría en centrarse en las HDL que tienen muchas funciones cardio y vasoprotectoras. Aparte del ácido nicotínico, que conlleva efectos secundarios importantes, los fármacos disponibles actualmente para la modificación de los lípidos apenas influyen en los niveles de HDL. Debido al interés clínico que despiertan, el proyecto HDLomics («Genómica funcional de los errores innatos y las intervenciones terapéuticas en el metabolismo de las lipoproteínas de alta densidad») se propuso mejorar el valor de los biomarcadores para el colesterol HDL como herramientas de diagnóstico y pronóstico. Los científicos del proyecto aplicaron un enfoque de genómica funcional que incluyó el estudio de las proteínas y los lípidos pertinentes. Esta vía de investigación resulta particularmente prometedora pues estudios previos habían demostrado que es la calidad de las HDL, y no su cantidad, lo que ejerce el efecto ateroprotector. Basándose en los datos genéticos de seres humanos y ratones transgénicos disponibles, los investigadores se centraron en dos posibles dianas terapéuticas relacionadas con el aumento de la expresión de los genes de la proteína casete de unión a ATP tipo A1 («ATP-binding cassette transporter A1» o ABCA1) y de la apolipoproteína A-I (Apo A-I), ambas responsables de los niveles bajos de HDL. Para los pacientes con niveles bajos de HDL y apo A-I, los investigadores han encontrado otra candidata para la terapia génica en la enzima lecitina-colesterol-acil-transferasa (LCAT). Respecto a la Apo A-I, los socios del proyecto descubrieron que, aumentando la lipasa lipoproteica, se pueden corregir los niveles bajos de HDL debidos a alteraciones en este gen clave. La manipulación de los niveles de HDL, según indican los resultados del proyecto HDLomics, resulta una vía prometedora para futuras investigaciones. Y con la vista puesta en el futuro de la genómica, la base de conocimientos del proyecto podría conducir al desarrollo de terapias génicas capaces de corregir los errores innatos del metabolismo de las HDL.