La importancia de los husos de sueño en la esquizofrenia
Los husos de sueño son ráfagas de actividad cerebral que anuncian el paso de la fase 1 del sueño (somnolencia) a la fase de sueño ligero, la fase 2. La actividad de huso refleja una actividad cerebral que puede ser importante y los investigadores están profundizando en los patrones eléctricos del cerebro durante la noche para detectar problemas funcionales. Al estudiar el cerebro dormido se reducen al mínimo actividades tales como los síntomas psicóticos y el deterioro de la capacidad cognoscitiva que complican los patrones de la electroencefalografía (EEG) cerebral en estado de vigilia. Los investigadores asociados en el proyecto Spindlesinschizo («Un estudio de la actividad de huso espontánea y evocada en personas con esquizofrenia y sujetos de control») están investigando las posibilidades de utilizar los denominados husos de sueño como biomarcadores para detectar anomalías cerebrales en la esquizofrenia. Estudios recientes han determinado que, comparados con los sujetos de control, los esquizofrénicos muestran una reducción significativa en los parámetros del huso. Los socios de Spindlesinschizo estudian a pacientes esquizofrénicos, pacientes bajo terapia antipsicótica y sujetos de control. Su objetivo es estudiar los patrones de EEG, sobre todo las ondas lentas y los husos de sueño, así como determinar la actividad EEG durante el sueño, oscilaciones de ondas lentas (1 Hz) y los llamados complejos K (ondas grandes) incluidos. Para ello sometieron a un total de más de ciento diez sujetos a un EEG de alta densidad durante toda la noche. Las personas con esquizofrenia presentaron déficits en el número de husos y en la actividad de huso integrada (ISA) en las regiones prefrontal, centroparietal y temporal del cerebro. En cambio, no se constataron pruebas de alteraciones en las ondas lentas. La información aportada por Spindlesinschizo tiene implicaciones importantes. En primer lugar, los déficits de actividad de huso se pueden atribuir al mal funcionamiento de los circuitos neuronales, puesto que no se producen en los pacientes no esquizofrénicos tratados con fármacos antipsicóticos. Otra conclusión importante a la que llegaron los investigadores es que los circuitos defectuosos pueden estar ubicados en el tálamo, ya que las células de esta región están involucradas en el fenómeno de los husos de sueño. De lo anterior se desprende que los husos de sueño podrían, en efecto, utilizarse como marcadores fiables de la esquizofrenia. Los investigadores del proyecto van a explorar más a fondo el uso del déficit del huso de sueño como un marcador viable. Se está investigando si es posible establecer la presencia de husos del sueño con un montaje EEG de baja densidad. En caso afirmativo, podrán obtenerse registros durante toda la noche en pacientes esquizofrénicos en un entorno no científico como clínicas y hospitales. Otra línea de investigación consiste en caracterizar el inicio de los husos de sueño, en particular habida cuenta de que vienen precedido por ondas lentas. Por lo tanto, en el futuro se podrían «inducir» husos de sueño en pacientes con esquizofrenia. El proyecto Spindlesinschizo ha sentado las bases para la comprensión de la fisiopatología de la esquizofrenia, uno de los retos más importantes de la psiquiatría actual. La identificación de anormalidades en el cerebro abrirá la puerta a terapias nuevas y mejores. Por extensión, estos conocimientos se podrían aplicar a la función del sueño en el aprendizaje y el desarrollo.