Los factores que causan la evolución de los virus
Los virus afectan a humanos, animales y plantas por igual, por lo que constituyen el grupo más significativo de parásitos capaces de provocar enfermedades. Su capacidad inherente para adaptarse a nuevos huéspedes o entornos es, en parte, la característica que propicia la existencia de tantas especies de virus diferentes. No obstante, los mecanismos precisos que subyacen tras dicha especiación siguen sin estar claros. Para arrojar luz sobre esta cuestión, el proyecto «Analysis of speciation mechanisms in RNA viruses» (RNAVIRSPE), financiado por la Unión Europea, analizó el papel que desempeñan diversos factores ecológicos en la evolución de los virus. A esto se sumó la evaluación de las tasas de mutación y los perfiles de expresión génica de tres virus animales y tres grupos de virus vegetales. El planteamiento partía de la base de que, más allá de aportar información de interés científico, tales análisis podrían contribuir a entender nociones relativas a la aparición de importantes patógenos. Sirviéndose de herramientas bioinformáticas de vanguardia, los científicos analizaron grandes conjuntos de datos sobre secuencias genómicas y realizaron reconstrucciones filogenéticas. De los resultados se desprendió que todos los virus presentan la misma tasa de evolución con independencia del huésped, si bien éste sí influye en la adaptación de los virus, en lugar de producirse una relación de codivergencia entre estos y aquél. La intervención humana y la heterogeneidad del hábitat también ejercen su influencia en la diversificación vírica, probablemente a causa de la necesidad de adaptarse al nuevo entorno. Curiosamente, la migración del huésped parece ser otro causante de la especiación de los virus. Usando la prevalencia del VIH en la región del Caribe a modo de ejemplo, los investigadores fueron capaces de establecer una asociación entre la estructura genética de una población vírica y el lugar de origen de la misma. También quedó patente que, aparte de la mutación y la recombinación, determinados genes pueden también desempeñar un papel en la evolución de los virus. Sin embargo, los virus de ARN con genes superpuestos mostraron una capacidad menor para generar nuevas variantes y formar nuevas especies. En consecuencia, la selección de genes de evolución lenta como objetivos podría servir para aumentar la duración de la protección que ofrecen las vacunas. La información obtenida durante el periplo de RNAVIRSPE podría adaptarse para prevenir el desarrollo de cepas víricas resistentes a los medicamentos. Asimismo, para diseñar estrategias de control de enfermedades víricas efectivas, deben contemplarse de forma conjunta tanto el huésped primario y sus rutas migratorias como la disponibilidad de huéspedes alternativos.