Sistema de detección de caídas para los ancianos
Casi la mitad de los ciudadanos de Europa superará la cincuentena en muy pocos años, un cambio demográfico que traerá consigo muchos retos, especialmente en el sector de la salud. Al mismo tiempo, con la evolución del concepto de familia hacia nuevas formas, cada vez son más los ancianos que viven solos. En este contexto, el proyecto HEBE («Dispositivo de vigilancia móvil y detección automática de caídas para ancianos que viven solos») tuvo como objetivo reforzar el apoyo a las personas mayores, en especial a las que viven solas. Europa desea fomentar que los ciudadanos de edad avanzada vivan más tiempo en sus propios hogares, pero para ello es necesario contar con el apoyo de mecanismos de seguridad de bajo coste y alta tecnología. El proyecto se centró en apoyar a los ancianos en sus actividades cotidianas (AC) y para ello propuso este dispositivo que les proporciona más seguridad y autonomía. Los sistemas actuales de control de las AC, como los botones de teleasistencia, ofrecen una ayuda limitada si el paciente se cae o se queda inconsciente, ya que en su mayor parte estos sistemas de detección son solo para uso en interiores. El equipo de HEBE ha propuesto un dispositivo de vigilancia completa para las actividades de interior y exterior basado en las tecnologías GPS, GSM y GPRS. Este discreto sistema se ha incorporado a un dispositivo portátil de poco peso y fácil de usar que se completa con la comunicación visual y por voz con un médico o un centro de llamadas que gestione situaciones de emergencia. Está formado por un componente móvil que el paciente lleva en el cinturón o en la cintura y que tiene una batería recargable. El sistema se ha diseñado y probado con éxito en el marco del proyecto y ya está listo para su fabricación y venta. Equipado con una gran variedad de sofisticadas funciones de asistencia para los ancianos, este sistema será crucial para mejorar el bienestar, evitar accidentes fatales y proporcionar una sensación de seguridad.