Vivir con los corrimientos de tierras
El proyecto SAFELAND, financiado con fondos europeos, puso a disposición de responsables políticos, científicos y educadores un sistema paneuropeo de evaluación del riesgo de corrimientos de tierra, además de permitir a la comunidad científica evaluar cómo afectan a dicho riesgo el cambio climático, la actividad humana o las distintas políticas. Se desarrollaron además una serie de directrices para determinar la estrategia de gestión de riesgos más adecuada, teniendo en cuenta posibles medidas de mitigación y prevención. El programa de investigación de SAFELAND estaba dividido en cinco áreas principales e incluía un estudio de actividades humanas y efectos del cambio climático susceptibles de desencadenar desprendimientos de tierra. El equipo de investigación procedió a unificar las metodologías de carácter cuantitativo a distintos niveles y a detectar las zonas de Europa que presentaban un mayor riesgo. Por otra parte, estudió distintas situaciones hipotéticas de cambio climático, evolución demográfica y desarrollo infraestructural para establecer los riesgos asociados en determinadas áreas. Se abordaron las dificultades de carácter técnico asociadas al desarrollo de sistemas de control y alerta temprana de corrimientos de tierra y se identificaron las mejores tecnologías de evaluación de riesgos. El consorcio desarrolló un conjunto de estrategias de mitigación y directrices para ayudar a los usuarios a elegir la más adecuada en cada caso para gestionar el riesgo. Los datos manejados por los artífices de SAFELAND, que se basan en terminología y metodología de evaluación y gestión de riesgos ampliamente reconocidas, contribuirán a la Directiva Marco de la Unión Europea sobre el suelo. Por otra parte, SAFELAND permitirá elaborar hipótesis de los efectos del cambio climático y la actividad humana y, por ende, evitar daños personales y materiales.