Mejor programación de las cadenas de suministro
Con actividades que van desde el refinado de petróleo crudo hasta la transformación de plásticos, la industria química está representada en la UE por 23 000 empresas, de las que más del 95 % son pequeñas y medianas empresas (PYME). No obstante, para garantizar la solidez del sector es necesario contar con cadenas de suministro de fabricación eficientes, un transporte ininterrumpido y una mejor planificación de las operaciones con el objetivo de lograr la producción de manera rentable (programación de flujo optimizada). El proyecto financiado con fondos comunitarios CAP-SCHED aceptó ese reto. Teniendo en cuenta que una programación de flujo ineficiente puede provocar millones de pérdidas, el proyecto buscó reducir drásticamente las múltiples simulaciones por ensayo y error realizadas por operadores humanos con el objetivo de optimizar la cadena de suministro. Se utilizaron técnicas de inteligencia artificial combinadas con métodos numéricos para la resolución de problemas a fin de ayudar rápidamente a los operadores humanos en circunstancias de operación difíciles o complejas. Simultáneamente, el equipo del proyecto consultó al sector para diseñar dos prototipos de sistema de programación. Los métodos diseñados fueron más allá de la tecnología disponible actualmente en el sector de procesos para poder superar problemas de programación como reactores polivalentes o el manejo de flujos que combinan características divergentes, convergentes y cíclicas. En este sentido, el sistema se ha diseñado para gestionar grandes problemas de programación que no pueden abordarse mediante un único enfoque tecnológico. Divide un problema en partes más pequeñas y combina diferentes enfoques tecnológicos, como la programación matemática, la simulación o la metaheurística, para conseguir sus objetivos. El primer prototipo está pensado para procesos de producción de varias etapas continuos y semicontinuos, tales como los procesos de refinado del petróleo crudo y de transformación química, incluida la producción de plásticos y de caucho sintético. El segundo prototipo se ha desarrollado para procesos por lotes de varios productos, varios niveles o varios recursos para sectores como el agroalimentario, biotecnológico, del acero, textil, del vidrio, del papel y del biocombustible. Gracias a las mejoras en la programación ofrecidas por estos prototipos, las empresas pueden manejar la cadena de suministro con más agilidad, mejorando la relación entre la planificación, la programación, las operaciones, la logística, las compras y las ventas. CAP-SCHED promete abordar las oportunidades comerciales perdidas, las dificultades para reaccionar frente a sucesos inesperados, las perturbaciones, la infrautilización de equipos y las pérdidas materiales y las energéticas. Este proyecto permitirá a la industria europea dar un importante paso adelante.
