Desentrañar los secretos de las explosiones estelares
El uso de ondas que circulan por la atmósfera solar para calcular parámetros imposibles de medir por otros medios se puso a disposición de la comunidad científica gracias a las observaciones de alta resolución generadas por observatorios tanto espaciales como terrestres. Estas observaciones, combinadas con modelos teóricos, sentaron las bases para el desarrollo de las técnicas de heliosismología y sismología coronal magnetohidrodinámica. La mayor sensibilidad de los telescopios modernos también ha ofrecido la oportunidad de observar oscilaciones en las explosiones coronales de otras estrellas. Astrónomos pertenecientes al proyecto SESTCOOS (Seismology of stellar coronal oscillations) se propusieron apoyarse en los conocimientos obtenidos mediante sismología coronal magnetohidrodinámica para estudiar la atmósfera estelar. El apoyo ofrecido por la UE les permitió introducir mejoras considerables en el código FoMo para plasmas de óptica delgada (Forward Modelling code for optically thin plasmas). Este código numérico se empleó en la determinación de las firmas de observación de oscilaciones de compresión y transversales que se producen en la atmósfera superior del Sol. El trabajo de modelización realizado por el equipo de SESTCOOS mostró que las oscilaciones transversales pueden generar estructuras en forma de cadena en la corona solar. Por otra parte, se desarrollaron y utilizaron modelos matemáticos nuevos a fin de calcular con precisión las oscilaciones en varias regiones del intenso campo magnético de la fotosfera. Los datos del Observatorio Apache Point en Nuevo México (Estados Unidos) mostraron claramente que la atmósfera de la enana roja YZ Canis Minoris genera ondas fuertes tras la producción de erupciones potentes. Esta estrella joven gira sobre su eje una vez cada 2,8 días, una rotación diez veces más rápida que la del sol, una estrella de mediana edad. La rotación rápida de YZ Canis Minoris provoca que las líneas del campo magnético se anuden y produzcan erupciones estelares extremadamente violentas. Las observaciones realizadas ofrecieron a los astrónomos de SESTCOOS indicios reveladores de oscilaciones de compresión que podrían tener su origen en erupciones e incluso servir para el estudio de otras estrellas. En un taller celebrado durante el proyecto SESTCOOS se dieron cita expertos en oscilaciones y erupciones estelares con el fin de debatir posibles vías de investigación para la sismología estelar, una rama nueva de la astrofísica que podría basarse en los conocimientos obtenidos de la atmósfera solar para aplicarlos al estudio de los las oscilaciones observadas provocadas por las erupciones.