Métodos integrales para el control de plagas
El escarabajo del maíz occidental (EMO, Diabrotica virgifera virgifera) supone una seria amenaza global para el cultivo del maíz. Las larvas de este insecto se alimentan de la raíz de la planta, impidiendo que el agua y los nutrientes se transporten de manera adecuada. Los daños que causa en la raíz son graves y afectan al crecimiento y la polinización, pero aún no se conoce con precisión el impacto económico que provoca. Por otra parte, se han desarrollado diversas iniciativas dirigidas a reducir la población del EMO, que deben integrarse en un plan científico y administrativo común. El objetivo principal del proyecto DIABR-ACT («Armonización de las estrategias para el control de Diabrotica virgifera virgifera»), financiado por la UE, consistió en establecer una estrategia unificada para mantener las poblaciones de este insecto bajo control. Los miembros del proyecto diseñaron un plan coordinado para la mejora del control y la prevención del EMO en Europa, empleando para ello estrategias de control de reconocida eficacia e identificando al mismo tiempo las prioridades para la investigación en esta área. Además, se evaluaron los costes del control y la erradicación de plagas. Entre las estrategias para el control del EMO que se investigaron se incluyeron métodos de control biológico, el empleo de caracteres de la planta relacionados con la resistencia, la adaptación de métodos biotecnológicos y diversas técnicas de cultivo. Cada país tendrá que adecuar estas estrategias a sus necesidades nacionales, pero todas las medidas adoptadas deberán tener el mínimo impacto posible sobre la biodiversidad y el medio ambiente. De manera adicional, se construyó una base de datos destinada a almacenar toda la literatura existente acerca de la ecología del EMO y los trabajos de investigación en marcha y se redactó una revisión exhaustiva de trabajos científicos anteriores sobre la biología de este organismo. Expertos en el cultivo del maíz y en la ecología del EMO trabajaron de manera conjunta con el fin de desarrollar estrategias para el control biológico de esta especie que puedan aplicarse a los métodos de control de otras plagas que afectan a este cultivo. También se evaluó la posibilidad de emplear diferentes enemigos naturales de este escarabajo para frenar las plagas. Los éxitos del proyecto DIABR-ACT quedaron resumidos en un informe, en el que se incluyeron las estrategias de control más prometedoras que los países europeos deberían adoptar con el fin de reducir las poblaciones de EMO. Este método integral de control podría significar el fin de las plagas ocasionadas por este insecto, mejorando de esta forma los sistemas europeos de producción de maíz.