El coche eléctrico urbano del futuro
Un 7 % del empleo en el sector industrial en Europa se atribuye al sector automovilístico, el cual aporta el 3 % de su producto interior bruto. Los vehículos eléctricos constituyen el futuro de este pilar económico, sin embargo, siguen siendo necesarias diversas optimizaciones del diseño. El proyecto «Advanced structural light-weight architectures for electric vehicles» (E-LIGHT) se encarga de esta tarea. El desafío desde el punto de vista arquitectónico consiste en crear un vehículo ergonómico y ligero que siga protegiendo a los pasajeros en las colisiones. A menos peso y mejor rendimiento aerodinámico, menor será el consumo del coche y mayor su recorrido con un solo depósito. A estos efectos, el proyecto se centra en el uso de materiales metálicos avanzados, componentes modulares y otras tecnologías de fabricación. El aluminio se consideró el material más adecuado, y los aspectos más valorados fueron la capacidad de reciclado y reutilización. El objetivo consiste en crear un vehículo que no pese más de 600 kg (sin baterías) y con un motor eléctrico de 25 a 35 kW de potencia. Asimismo, debe tener capacidad para cuatro pasajeros y su diseño debe ser lo más parecido posible al de un vehículo clase A. El equipo del proyecto llegó a la conclusión de que la configuración más adecuada para los coches eléctricos urbanos del futuro es una distribución de cuatro asientos con eje de tracción trasera y batería central. Los resultados del proyecto se resumirán en una serie de documentos que destacarán los aspectos de seguridad, las directrices generales de diseño, los procedimientos de prueba y las recomendaciones. Esto será de gran utilidad para pequeñas y medianas empresas a la hora de diseñar coches eléctricos, ya que les permitirá seguir siendo competitivos en el cambiante sector automovilístico europeo.