Un anillo remodelador para tratar la hiperplasia benigna de la próstata
La próstata es una glándula sexual que rodea la uretra en los hombres. Junto con las vesículas seminales, ayuda a producir semen, el fluido reproductor viscoso necesario para que los espermatozoides viajen.
No hay un tratamiento definitivo sin riesgos para la hiperplasia benigna de la próstata
A medida que los hombres envejecen, la próstata se agranda, lo que deriva en una enfermedad denominada hiperplasia benigna de la próstata(se abrirá en una nueva ventana) (HPB). Casi la mitad de los hombres de cincuenta años padecen HPB: los síntomas del aparato urinario incluyen cambios en la frecuencia urinaria, evacuación incompleta de la vejiga urinaria, nicturia y disfunción sexual. La HPB se puede tratar durante varios años con medicación permanente pero, en último término, se recomendará un tratamiento de la próstata para evitar complicaciones adicionales. Los tratamientos actuales, como la extirpación del tejido prostático, las endoprótesis uretrales y el estiramiento mecánico de la próstata, ofrecen alivio a corto plazo, pero están asociados con efectos secundarios.
Un anillo prostático para prevenir la estenosis uretral
Para abordar este problema, el equipo del proyecto ClearRing, financiado con fondos europeos, desarrolló un implante con forma de anillo. «Se trata de una innovación mínimamente lesiva que se incrusta en el tejido de la próstata para expandir el área uretral constreñida, lo que ofrece alivio durante muchos años», explica Gilad Hizkiyahu, coordinador del proyecto y director general de ProArc Medical(se abrirá en una nueva ventana). El sistema ClearRing consta de un implante y un dispositivo de inserción. El implante, superelástico y biocompatible, se enrolla alrededor de un globo de dilatación en el extremo distal del dispositivo de inserción. El lado proximal del dispositivo cuenta con un mando de control ergonómico, un conector para inflar el globo y una unidad de diatermia(se abrirá en una nueva ventana). El ClearRing se inserta en la uretra del paciente y se guía visualmente hasta que llega a la próstata. Tras inflar el globo para expandir la uretra, el dispositivo realiza una pequeña incisión mediante electrocauterización(se abrirá en una nueva ventana). Esto facilita la liberación del implante dentro del tejido de la próstata que impide que las paredes de la uretra colapsen. La intervención quirúrgica completa dura menos de diez minutos con anestesia reducida.
Eficacia clínica y durabilidad
La primera generación del dispositivo ClearRing se probó en un ensayo clínico, que reveló el alivio de los síntomas de los pacientes y la reducción de la hiperplasia prostática. También se observó una mejora de los parámetros de orina medidos y de la calidad de vida. Los resultados de los ensayos clínicos posicionan a ClearRing al mismo nivel que el tratamiento de referencia en términos de eficacia, y a un coste menor. «Un tratamiento de la HPB debe ser eficaz y seguro, pero también ofrecer al paciente un alivio duradero de los síntomas; ningún paciente quiere oír que tienen que repetir la intervención quirúrgica en un par de años», recalca Hizkiyahu.
La nueva generación del dispositivo programada para su comercialización
El equipo de ProArc está realizando los preparativos para llevar a cabo un estudio piloto multicéntrico, cuyo objetivo es demostrar la eficacia y la seguridad de su nueva generación del dispositivo de inserción de implantes guiada visualmente. A continuación, la empresa realizará la solicitud de autorización y pondrá en marcha un ensayo fundamental para el registro mundial a gran escala que, con suerte, establecerá ClearRing como un tratamiento habitual para la HPB. Se espera que ClearRing empiece a comercializarse en tres o cuatro años, después de la realización de ensayos clínicos exhaustivos. Las características de la intervención quirúrgica mejorarán el cumplimiento del paciente y superarán la necesidad de medicación permanente. Ayudará a millones de hombres de todo el mundo a resolver su problema de HPB en lugar de evitar tratarlo por miedo a los efectos adversos.